El Controller Pak es el dispositivo de almacenamiento de datos de la Nintendo 64, similar a la Memory Card de su rival PlayStation o el cartucho de memoria de Sega Saturn.
El Controller Pak estándar tenía una capacidad de 256 KB, dividida en 123 "páginas". Más adelante, se lanzaron tarjetas con más memoria, muchas de ellas de fabricantes externos, que podían almacenar entre uno y cuatro megabytes. Estas tarjetas permitían guardar los avances de los videojuegos. Para usarlas, había que insertar el Controller Pak en la parte posterior del mando de la Nintendo 64 (donde también se podían conectar el Rumble Pak y el Transfer Pak). El Controller Pak también servía para intercambiar partidas entre los dueños de una Nintendo 64, ya que los datos guardados en el cartucho no se podían transferir a otro.
La mayoría de los juegos de Nintendo 64 no utilizan el Controller Pak porque emplean cartuchos con pila de guardado. Solo algunos juegos permiten guardar datos en el Controller Pak de forma opcional, cuando la información es demasiado grande para almacenarla en el cartucho. Por ejemplo, Mario Kart 64 usa 121 páginas para guardar los datos del corredor fantasma.
La Nintendo 64 no tiene un programa propio para organizar los datos guardados de los juegos que son compatibles con el Controller Pak. Sin embargo, si se presiona el botón Start mientras se enciende y se carga el juego, se puede acceder a un gestor de partidas que está incluido en el cartucho (creado por cada desarrollador del juego).